Los bares clandestinos en Nueva York se han convertido en unos de los lugares más populares para visitar durante un viaje turístico. Son exclusivos, diferentes y con un ambiente misterioso capaz de atrapar a cualquier persona que ingrese a ellos.
Además, el hecho de que algunos de estos bares se han mantenido abiertos desde los años 20 y 30 (era de la prohibición) los vuelve deseables. Claro, no todos han mantenido la originalidad. No obstante, aún puedes encontrar algunos auténticos speakeasy de Nueva York. ¿Estás listo para visitarlos?
El Bronx, antiguas sombras y nuevas luces
Pese a la mala fama que tuvo en su momento el Bronx, a la que contribuyeron mucho películas como Distrito Apache (Fort Apache, the Bronx - Daniel Petrie - 1981), lo cierto es que esa imagen negativa en todo caso correspondería a lugares muy concretos de la zona sur del distrito, y más próximas a las décadas de los 70 y 80. Más de 40 años más tarde, la evolución es evidente.
¿Qué eran los bares clandestinos en Nueva York?
Los bares clandestinos en Nueva York eran bares de puerta cerrada que acogían a la clientela a pesar de la Ley de la Prohibición (Ley Seca). Eran, con otro nombre, bares secretos donde solo los más distinguidos podrían entrar.
Bares clandestinos de los años 20 a 30
Fue a finales de 1910 cuando se vio el éxito de la Prohibición y el Movimiento de Templanza en la 18.ª Enmienda. No obstante, no todas las personas lo aceptaron y comenzaron a crear bares secretos con el objetivo de:
- Vender alcohol de manera ilegal.
- Ofrecer un lugar secreto y privado para conversaciones de gánsteres y otros famosos de la historia.
- Brindar un espacio a las mujeres flappers (movimiento vanguardista).
Aunque al principio se reunían en cualquier lugar de los Estados Unidos, los speakeasy comenzaron a volverse más populares en Nueva York y Chicago y allí se quedaron.
Bares clandestinos modernos
Ciertamente, ahora no eluden el control de alcohol de los años 20. Sin embargo, en la actualidad los bares clandestinos se han convertido en un gran punto de encuentro para los jóvenes. Además, para los turistas, visitar este tipo de lugares causa placer y emoción.
Diferencias entre ambos
La primera de todas, ya no son ilegales. Ahora puedes ingresar a cualquier bar clandestino mientras dispongas de la edad. Además:
- Ya no necesitas contraseñas secretas.
- Los menús no son cambiantes.
- La entrada está donde todos la ven.
- No necesitas ser de la alta alcurnia para ingresar.
Sin embargo, si deseas sentirte de la época, puedes utilizar un traje de gala o un vestido flapper en caso de ser mujer. No obstante, si algo es seguro es que debes conocerlos.
Si estás en Nueva York, debes visitar los siguientes tres bares
Los bares clandestinos en Nueva York pueden brindarte una experiencia inimaginable. Ciertamente, al escuchar “clandestino”, muchos creen que se trata de lugares ilegales, sin embargo, no es así.
De hecho, mientras cumplas con la edad requerida, podrás disfrutar de los siguientes mejores bares clandestinos ubicados en la Gran Manzana.
1. Little Branch
El mejor de todos. Con cocteles de todo tipo e increíble música en vivo, Little Branch te atrapará en un instaste. Cabe destacar que, si eres fanático de los auténticos speakeasy de Nueva York, llegaste al lugar correcto.
Al parecer, fue la fundadora del primer speakeasy, Sasha Petraske, quien ayudó con la construcción de este recinto. Como resultado, ahora puedes disfrutar un bar con un estilo auténtico. La verdad, ni siquiera el más moderno se compara con él. Además:
- Ofrece una atmosfera íntima y tranquila.
- El recinto presume de un estilo retro, muy a lo antiguo.
- Los camareros y resto del personal son amables y atentos.
Finalmente, no solo podrás encontrar todo tipo de bebidas alcohólicas, sino también jugos naturales, entre otros comestibles. Si te encuentras en Greenwich Village, cerca de Washington Square Park, no dudes en visitar Little Branch.
2. Attaboy
Ubicado en uno de los mejores barrios de Manhattan, Attaboy es conocido por ser uno de los bares clandestinos más populares del momento. Quizá sea debido a sus excelentes bebidas o a que es el reemplazo de Milk and Honey, el bar fundado por la ya nombrada Sasha Petraske. Es importante mencionar que:
- Sus creadores fueron dos fieles aprendices de Sasha.
- Es el bar más moderno del Lower East Side.
- Es conocido por conservar elementos de los bares del pasado.
Además, sus camareros son amables y expertos en su trabajo. Entre los cocteles más pedidos están Penicillin y Paper Plane. Además, si deseas una bebida fuera del menú, puedes solicitarla a cualquiera de los trabajadores, ya que están abiertos a nuevas sugerencias.
3. The Back Room
A tan solo unas cuadras de Attaboy, The Back Room abrió las puertas para su público desde los años 20 y 30. Aunque para llegar se debe caminar un poco más, el hecho de poder visitar un auténtico bar creado en la época de la Ley Seca de Nueva York no tiene precio. Además:
- Su elegancia y distinción están por encima del resto de los bares de este tipo.
- Sus trabajadores siguen rígidas reglas con el objetivo de transportar al público hasta hace más de cien años atrás.
- Era conocido por ser el principal rival de Bills BarJ, otro bar clandestino de la época.
- Acogió a reconocidos actores de teatro y cine, además de gánsteres famosos, como Bugsy Siegel, Lucky Luciano y Meyer Lansky.
Finalmente, dispone de cocteles únicos como, por ejemplo, Banananana Manhattan y Harlem Sunset. ¿Estás listo para la diversión?